Sí. Me he dedicado a lo largo de mi vida personal y profesional a descubrir todos los atajos para lograr cambios rápidos y profundos. Si en 3-4 sesiones no hemos logrado ya un cambio importante en tu vida seré el primero que te diga que no estoy sabiendo acompañarte a mejorar para que puedas buscar una persona que te ayude mejor. Nunca alargaré una terapia que no sepa que va bien encaminada.

Para eso tenemos la entrevista. En la entrevista tendrás espacio para contarme lo que estás viviendo, y podrás ver por ti mismo si comprendo la situación y tengo claro cuál es el camino para resolver tu problema. Si al terminar sientes que puedo ayudarte, pondremos la primera sesión y empezaremos a trabajar en la solución. 

Juntos vamos a solucionar el problema. Mi trabajo es abrirte caminos nuevos de los que no eras consciente para resolver el problema, y el tuyo es avanzar por ellos con las herramientas que te dé una vez los descubras. Por eso siempre mando tarea obligatoria, la tarea que te permita seguir avanzando hasta lograr lo que hayamos establecido como objetivo de terapia. Avanzarás siempre con mi apoyo detrás.

Es imposible no cambiar, el ser humano es cambiante por naturaleza y lo que debemos hacer es elegir la dirección en la que queremos cambiar. Una vez elegida, habrá que entrenar las capacidades, habilidades, que necesites para superar aquellos obstáculos que te estaban costando superar en tu vida.

Mi método de trabajo busca minimizar el tiempo de terapia con el máximo impacto posible. Por eso mis sesiones duran hora y media y no nos veremos todas las semanas, sino cada 2 semanas o incluso más, según lo que tú me digas que necesitas. Durante este tiempo podrás preguntarme dudas por correo respecto a las tareas que estés realizando. La terapia a veces dura 2 o 3 sesiones, otras veces 10-12. No existe un número definido, dependerá de lo que necesites desarrollar y tu ritmo de crecimiento, por supuesto, cuanto más te impliques, más rápido lograrás los cambios. La media de mis terapias son unas 6-7 sesiones.